La palabra tanatología proviene de “tanatos” que significa muerte y “logos” que significa tratado, así que se entiende como el tratado de la muerte. Más bien es una disciplina científica mediante la cual se puede aprender, la forma sutil, para acompañar a las personas que se encuentran en un proceso de muerte o de sus familiares para así alcanzar “el bien morir”. La psicóloga con maestría de Psicoterapia, Eloisa Vega es de las profesionistas pioneras en tratar esta ciencia nueva tan difícil de entender en la mayoría de los seres humanos. De hecho se trata de una persona profesional y con la calidad humana que este tema tan complicado requiere, por ello está al frente de Instituto de Tanatología y Logoterapia de Puebla. “Se trata de un término que nos asusta, siendo que la muerte es parte de este ciclo vital de todo ser humano, como nacer, vivir y morir. Temor que se fundamenta en que es una experiencia individual y nadie nos dice como fue este proceso y sus referencias. Aunque si hay estudios y testimonios de muerte biológica de personas que aparentemente sufrieron este proceso por minutos y pese a que se reportan como experiencias agradables, siempre es una situación que asusta”. Con tono pausado, y una tranquilidad que se contagia, la maestra Eloisa Vega precisa que la tanatología está dirigida a personas que tienen una enfermedad terminal o sufren la muerte de algún familiar. Así que dentro de la formación de tanatólogos deben considerarse a personas mayores de 18 años, que tengan esa vocación de acompañar a los seres dolientes, además de que como guías hayan tenido una experiencia previa que los sensibilizó, aunado a una vocación natural que se pueda orientar con conocimientos, prácticas y supervisiones adecuadas. “Yo creo que es un tema en el que las personas se deben preparar para lograr una paz interna, cerrar ciclos pendientes en la vida, lograr reconciliaciones con personas cercanas si hay asuntos pendientes, perdonar a los otros y perdonarse a sí mismo”. A la par la logoterapia, funciona como apoyo a la tanatología, considerando a ésta como el estudio que ayuda a las personas a encontrarle un sentido a la vida y por ello también a la muerte. Hay que aprender a vivir y a morir. Quienes han perdido un ser querido se encuentran en proceso de duelo, de aproximadamente una duración de dos años, y tienen que integrar este duelo a su vida, por lo que se interesan por saber más de este fenómeno.
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